¿Quién contra nosotros?

August 05, 2014

¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? (Romanos 8:31)

Alabo al Señor por las cosas maravillosas que en su infinito amor él está haciendo entre los hermanos de Michoacán, México. Durante nuestra reunión del domingo, en la obra de Dr. Miguel Silva, uno de ellos contaba una experiencia impactante para nuestro aumento de fe.

El hermano Mario nos conversaba que cierto día al amanecer lo despertó la voz de su esposa—la hermana Juanita—quien se encontraba durmiendo y repitiendo en voz fuerte: “Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” El hermano Mario se preguntaba qué sería lo que su esposa estaría soñando. Luego de un rato preguntó a su esposa, pero ella recordaba ningún episodio parecido, y extrañada respondió a su marido si tal vez todo esto era sólo algo de su imaginación. El hermano Mario, le decía: “pero si te oí varias veces, ¡no estoy loco!”

Eran las 13:00hrs de ese mismo día y el hermano Mario recibe una llamada de una persona asociada al crimen organizado, que le decía que si no pagaba ese mismo día cierta suma de dinero, secuestrarían a su hija. La tenían vigilada y estaban listos para la acción. El hermano Mario con pesar ante tan amarga noticia, en ese momento recordó la frase que su esposa había repetido mientras dormía, y comprendió que fue Dios quien le había hablado en la mañana a través de su esposa. “Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” El hermano fortaleció su fe y se llenó de valor para responder al que estaba al otro lado de la línea. Su respuesta fue: “¡Procedan! Pues a nosotros no nos pueden hacer daño” y cortó el teléfono.

A los pocos minutos vuelve a sonar el teléfono y el hermano Mario responde la llamada. Era la misma voz. Esta vez el hombre del otro lado de la línea comienza a insultarlo por haberle colgado el teléfono y le re-afirma su amenaza: “si no pagas hoy mismo tal  suma de dinero, secuestraremos a tu hija. La tenemos vigilada y estamos listos para la acción.” El hermano Mario una vez más responde: “No te pagaré ningún dinero, no te tenemos miedo. Procede como quieras, a nosotros no pueden hacernos daño, porque Dios está con nosotros, y si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” Y nuevamente cortó el teléfono.

A las pocas horas, su hija llegó a casa sana y salva. Nada ocurrió gracias a Dios. Y hasta el día de hoy no ha vuelto a recibir ningún tipo de amenaza para la gloria del Señor. ¡Qué maravillosa es la protección de Dios hacia quienes temen y confían en él!

Bendeciré a Jehová en todo tiempo; Su alabanza estará de continuo en mi boca (Sal 34:1). Una hermosa experiencia que nos sirve para el aumento de nuestra fe. ¡Alabado sea el Señor!

—RJM

3 comments:

Anonymous said...

Wow.. Que bonito lo que Dios está haciendo allá en México!

Christian Moreno Pavis said...

Es una hermosa experiencia que nos llena de fe a los que no padecemos este tipo extremo de dificultades. Dios siga fortaleciendo la obra en ese estado y a los que están siendo usados para llevar el mensaje de esperanza. Por nuestro lado redoblaremos nuestras oraciones por la obra misionera.

Unknown said...

Qué tremendo!, la gloria de Dios se manifiesta en los suyos cuando ejercemos la fe. Dios les siga bendiciendo.
Saludos desde Chile.
Atte. Emilio González.

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